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INIA La Platina lanza proyecto clave para enfrentar la salinidad del río Maipo y proteger la producción de nogales

La iniciativa, financiada por FIA, validará estrategias de riego y enmiendas orgánicas para mitigar el impacto de la salinidad en la Cuenca del Maipo, además de desarrollar una herramienta digital para estimar riesgos y apoyar la toma de decisiones en el cultivo de nogal.

Santiago, noviembre de 2025.– Con la salinidad del río Maipo aumentando de manera sostenida y superando límites normativos para riego agrícola, INIA La Platina dio inicio a un proyecto estratégico para fortalecer la resiliencia del nogal, uno de los cultivos más relevantes de la Región Metropolitana, que concentra cerca del 30% de la superficie plantada a nivel nacional.

El proyecto “Manejo sostenible del suelo y riego en nogales: Estrategias para enfrentar la calidad del agua en la Cuenca del Maipo” será ejecutado entre 2025 y 2028 con financiamiento de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) y la participación de ChileNut y Servicios Agrícolas Pucalán Sur, quienes aportarán experiencia y validación en terreno.

El cambio climático ha elevado la salinidad del agua en la cuenca, reduciendo el crecimiento del nogal hasta en 18% y la producción en 21% por cada 1 dS/m adicional de conductividad eléctrica. A esto se suma la ausencia de estrategias agronómicas validadas y la necesidad de fortalecer capacidades técnicas en la región.

“Cambió el clima y cambió la calidad del agua. Hoy debemos revisar nuestras estrategias y adaptarnos. Este proyecto generará conocimiento y herramientas reales para los productores. En INIA estamos para eso: para resolver problemas y generar valor”, afirmó Gabriel Raffo, director regional de INIA La Platina, durante el lanzamiento realizado en el Centro Experimental Los Tilos.

Ensayos en terreno y validación con productores

La iniciativa evaluará seis tratamientos de enmiendas orgánicas y fertilización, combinados con dos estrategias de riego (reposición estricta de la evapotranspiración y reposición con requerimiento de lixiviación).

Los ensayos se desarrollarán tanto en el Centro Experimental Los Tilos como en un predio asociado a ChileNut, permitiendo validar resultados bajo condiciones reales de producción.

Durante tres temporadas se medirán propiedades físico-químicas del suelo, conductividad eléctrica, crecimiento vegetativo, y parámetros de calidad de nueces como calibre, llenado, color y partidura.

“Los asociados cumplen un rol clave. Y lo que aprendamos aquí se podrá extrapolar a otros cultivos de la Región Metropolitana, siempre afectados por el agua del Maipo”, explicó el coordinador del proyecto, Dr. Alejandro Antúnez, investigador de INIA La Platina.

Uno de los objetivos centrales es validar el uso de compost y ácidos húmicos–fúlvicos como herramientas de nutrición y mejora del suelo frente a la salinidad.

“Las enmiendas orgánicas permiten aportar nutrientes de forma eficiente y a menor costo, pero además mejoran la estructura del suelo, aumentan la biomasa microbiana benéfica y capturan sales mediante enlaces químicos estables. En nogal ya hemos visto resultados muy exitosos disminuyendo la conductividad eléctrica y mejorando el crecimiento”, señaló el investigador Juan Hirzel, coordinador alterno del proyecto.

El equipo recordó que el uso de fertilizantes convencionales ha ido disminuyendo en Chile y que las alternativas orgánicas, además de ser más sostenibles, han cobrado relevancia especialmente en contextos de escasez de insumos, como ocurrió en la pandemia.

Desde la industria, los productores valoraron la pertinencia del proyecto frente a un problema que se agudiza cada año. Para ellos, lo importante es ver cómo mejora la calidad y sanidad del árbol y cómo reducir el efecto de las sales. 

El proyecto además desarrollará una plataforma digital en línea para estimar el riesgo asociado a la salinidad del agua de riego. La herramienta permitirá a productores y asesores tomar decisiones informadas a partir de datos actualizados.

Para FIA, este componente es estratégico. Su modelo de transferencia asegura que la tecnología sea adoptada por los usuarios finales y que la herramienta se incorpore a la gestión predial.

La subdirectora de I+D+i de INIA La Platina, Cristina Vergara, destacó la relevancia de que la investigación se realice directamente en el campo Los Tilos.

“Tener proyectos de innovación dentro del campo es fundamental: nos permite unir el lado productivo con el desarrollo de I+D, y eso acelera la transferencia tecnológica”, afirmó.

Desde el ámbito técnico, el investigador de suelos de INIA La Platina, Fabio Corradini, enfatizó que el desafío requiere respuestas urgentes. 

“Debemos entender cómo manejar el suelo para mitigar el efecto salino del agua. La aplicación de materia orgánica nos ayuda a estabilizar el suelo y mejorar el intercambio de nutrientes. Es clave para reducir el impacto de la salinidad”, indicó.

Con una duración de tres años, el programa generará estrategias validadas, una herramienta digital de apoyo a decisiones y capacitación para productores y asesores, contribuyendo a una gestión más sostenible del agua y del suelo en la principal cuenca agrícola de la Región Metropolitana.

INIA La Platina confirma así su rol como articulador científico y tecnológico para enfrentar los desafíos del cambio climático y proteger la competitividad del nogal chileno.